Lázaro Cárdenas del Río.

México en la década de 1930.

20 años después de la revolución mexicana, México entra en una etapa diferente de desarrollo económico, político, social y cultural; Lázaro Cárdenas, presidente electo para el primer periodo sexenal de la historia de México (1934-1940) destaco, entre otras acciones de gobierno, por la reforma agraria y la creación de los “ejidos” en el agro mexicano; por la nacionalización de los recursos de subsuelo, en especial, del petróleo. Así como, por haber consolidado las bases del funcionamiento del partido nacional revolucionario, mediante la incorporación de las grandes centrales obreras, hacia el partido nacional de la revolución mexicana. Mientras México entraba en un periodo que de 1930 se extendería hasta 1970 denominado por los historiadores como el “milagro económico”, una etapa de crecimiento acelerado, estimulado por el modelo de industrialización y substitución de importaciones, el cual protegía y promovía el desarrollo de la industria nacional. Atreves de este modelo, el país experimento un auge económico en el que las industrias expandieron rápidamente su producción. Sería el comienzo de muchos cambios importantes en la estructura económica de México. La distribución gratuita de la tierra a campesinos bajo el concepto del “ejido”, la nacionalización de las industrias petrolera y ferroviaria, la incorporación de los derechos sociales en la constitución, el nacimiento de los grandes sindicatos de obreros y la modernización de la infraestructura.

El presidente Lázaro Cárdenas del Río lee el decreto de expropiación petrolera en el balcón central de Palacio Nacional, durante la magna manifestación de apoyo, el 23 de marzo de 1938.